Hoy en día, además de preocuparnos por conservarlos para otro momento, también procuramos mantener la mayor cantidad de nutrientes posibles durante dicho periodo de conservación.
Existen varias formas de conservar los alimentos. Hay que tener en cuenta que no todos pueden ser sometidos a las mismas técnicas. Todo dependerá del uso que quiera dársele y de los componentes de los mismos.
Así lo señala la autora de “Nutrición para Dummies”, Carol Ann Rinzler “El frío, el aire caliente, la ausencia de aire…se pueden utilizar para conservar durante más tiempo los alimentos dado que reducen o eliminan el daño ocasionado por la exposición al aire o a organismos (microbios) que habitan en ellos”. 1 Rinzler C. (2006) Nutrición para dummies. Grupo editorial Norma, S.A. Colombia. P-323
1. CONSERVAR LOS ALIMENTOS CON CALOR
Cuando cocinamos los alimentos estamos destruyendo la mayoría de los gérmenes que contienen (todo depende de la temperatura y el tiempo que apliquemos). 2 www.consumer.es
Los alimentos como las carnes y las aves pueden ser perjudiciales para la salud si se ingieren crudos o poco cocidos. Además cuando están cocidos duran más tiempo (si los guardamos crudos en la nevera pueden durar frescos solo 2 días aproximadamente).
Para no perder los nutrientes durante la cocción lo ideal es cocinar al vapor, asarlos o guisarlos, evitando así hervirlos o freírlos. De esta forma aprovechamos mejor los nutrientes y evitamos sumar grasas innecesarias a nuestra dieta.
En el caso de las verduras y las hortalizas, a pesar de que recomiendan consumirlas crudas, es posible cocinarlas en el horno, al vapor o en baño de maría para evitar la pérdida de nutrientes. De esta forma también nos aseguramos de eliminar posibles gérmenes.
2. CONSERVAR LOS ALIMENTOS CON FRÍO
El frío (o congelamiento) nos ayuda a detener de forma parcial el desarrollo de los microbios en los alimentos. Pero debemos tener cuidado. Una vez que los sacamos, los microbios vuelven a activarse.
Para asegurarnos de conservar los alimentos correctamente en la nevera o el congelador, es importante que la nevera mantenga una temperatura estable. 3 www.vix.com
También debemos asegurarnos de que los alimentos estén frescos al momento de guardarlos para que duren más tiempo (Hay que tener en cuenta que el proceso de congelación vuelve más seco los alimentos al momento de cocinarlos).
Para conservar mejor los alimentos en la nevera lo más apropiado es utilizar envases herméticos. En el caso de las frutas y las verduras, éstas se conservan mejor separándolas en bolsas de plástico con pequeños agujeros.
Esos agujeros permiten que las verduras o las frutas reciban oxígeno, lo que las ayuda a conservarse por más tiempo. Sin embargo, es mejor que no dejemos pasar mucho tiempo antes de consumirlas para evitar la pérdida de sabores.
Por otro lado, es mejor que evitemos congelar alimentos como:
3. CONSERVAR LOS ALIMENTOS AL SECO O AL AIRE LIBRE
Una de las mejores técnicas para conservar los alimentos es lavando todo antes de guardarlo o cocinarlo. Si vienen con un poco de tierra durarán menos tiempo. Aunque existen alimentos como las hierbas que se conservan mejor si no se limpian hasta el momento de usarlas.
Luego de lavar todo, lo podemos colocar en un lugar fresco donde puedan secarse rápidamente. Esto permite eliminar la humedad y con ello evitamos la proliferación de bacterias.
Un ejemplo de alimentos que se conservan perfectamente fuera de la nevera son las papas, el tomate, la cebolla y el ajo.
En el caso de los alimentos enlatados, es necesario que verifiquemos tanto la fecha de vencimiento como el estado del producto.
Si observamos imperfecciones como óxido, abultamiento o algún tipo de rotura, es mejor desechar el producto (al entrar el aire en la lata estropea el contenido).
LO QUE HEMOS APRENDIDO
La primera es someterlos a calor. Es una buena forma de eliminar agentes dañinos y de conservar durante más tiempo la comida. Para conservar mejor los nutrientes y evitar subir de peso es mejor no cocinarlos en aceite.
La segunda opción es guardarlos en la nevera, lo que retrasa la reproducción de las bacterias. Lo ideal es guardar la comida en envases sellados o si son frutas y verduras, en bolsas plásticas con pequeños orificios que les permitan respirar.
Por último podemos conservar los alimentos dejándolos al aire libre en lugares secos. Claro que primero debemos lavarlos y dejar que se sequen de forma natural.
En suma, está comprobado que al manipular de forma correcta los alimentos podemos conservarlos por varios días e inclusive meses. Todo depende de su composición y la utilidad que queramos darles.