Por el simple hecho de que la etiqueta de un producto indique que es light o integral, no quiere decir que todos sus componentes sean totalmente saludables.
Por supuesto que la forma como beneficie o perjudique al organismo radica en la frecuencia y las porciones ingeridas por cada persona.
Por eso para poder mantener una dieta balanceada y elegir de forma adecuada, es importante saber cuáles “alimentos parecen saludables” pero la verdad no lo son. Veamos los más comunes:
1. LOS FAMOSOS SNACK
Si bien es cierto que las porciones son pequeñas, la mayoría contienen sucralosa (un sustituto artificial del azúcar) quien genera la necesidad de consumir más carbohidratos para conseguir el azúcar que el cuerpo necesita y estas barritas no aportan.
Otros componentes son el trigo, la avena, el maíz, el arroz, la miel, los frutos secos y la leche, es decir: Todo un cóctel de carbohidratos y grasas (dependiendo del proceso de elaboración y las porciones por empaque).
En esta gama se encuentran igualmente las papas fritas o chips de verduras, las cuales contienen mucha grasa (son fritos), sal y pocas vitaminas por la forma en que deshidratan las verduras durante su elaboración.
2. REFRESCOS LIGHT
La única diferencia realmente importante entre un refresco normal y una bebida light, es que el segundo no contiene azúcar refinada, pues la sustituyen por edulcorantes como la sucralosa.
Pero también contiene otros ingredientes como los colorantes, los conservantes y la cafeína. Estos pueden causar el desarrollo de cáncer, dolores de cabeza y descalcificación en los huesos si no se consume con moderación. 1 unisima.com
3. ENSALADAS DE RESTAURANTES
Los ingredientes más comunes que le colocan a las ensaladas en los restaurantes son la sal y los aderezos.
Un consumo excesivo de sal causa retención de líquidos así como hipertensión, mientras que los aderezos (dependiendo de su contenido) aportan muchas calorías, lo cual se traduce en grasa acumulada en nuestro organismo. 2 www.abc.es
4. PAN INTEGRAL
Sin embargo, un estudio llevado a cabo en el año 2017, donde un grupo de voluntarios consumió más pan blanco, y otro grupo elevó su consumo de pan integral, demostró que ninguno es más saludable que el otro.
Estudiaron parámetros como los niveles de glucosa, el colesterol, los minerales esenciales y varios marcadores de inflamación. En ninguno hubo diferencias significativas.
Sin embargo, un consumo frecuente de pan integral está asociado a una digestión más fácil por la fibra que aporta, pero ¡Cuidado! Si se consume en grandes cantidades igual puede generar un exceso de peso.
5. SOPA INSTANTÁNEA O DE SOBRE
A pesar de ello, tienen un alto contenido de sal, conservantes y aditivos artificiales. Entre ellos se destaca un potenciador de sabor llamado glutamato monosódico. Cuando lo consumimos en exceso podemos sufrir tanto de dolores de cabeza como musculares.
6. SALSA DE SOJA
Existe gran variedad de marcas en el mercado, pero en su mayoría todas contienen colorantes, endulzantes y muchísimo sodio. 4 www.eldiario.es
Si bien es cierto que aporta proteína vegetal y antioxidantes, si se consume en exceso puede disminuir la absorción de minerales como el magnesio o el hierro.
OTROS ALIMENTOS QUE TAMPOCO SON SALUDABLES
Otros alimentos que dejan de ser saludables cuando lo procesamos son las frutas. Cuando consumimos la fruta en jugo, es como si le estuviéramos dando al cuerpo una inyección de azúcar.
Al no masticar la fruta, impedimos que el organismo la digiera lentamente, con lo cual desaprovechamos todos sus nutrientes y la sensación de saciedad que nos aporta. Además no le permitimos a nuestro cuerpo procesar los cambios de azúcar e insulina de forma adecuada.
¿Quién no ha probado unas palomitas de maíz instantáneas? Es imposible negar que esas palomitas hechas en el microondas son muy apetitosas.
Pero la verdad es que es maíz genéticamente modificado (son manipulados para poder ser producidos de forma masiva y que se conserven durante mucho tiempo). Gracias a los químicos que contienen resultan ser poco saludables. 5 www.dineroenimagen.com
APOSTEMOS POR OPCIONES SALUDABLES
Si los preferimos salados, una buena opción es cocinar papas, zanahorias o berenjenas en el horno.
Si por otro lado queremos algo dulce, entonces las manzanas o las peras también son saludables de forma natural o cocinarlas igualmente en el horno.
Realizar las ensaladas en casa nos permite controlar los ingredientes y los aderezos. Existe una gran variedad de recetas sanas que podemos cocinar. Algunas tienen la ventaja de que no necesitan muchos ingredientes, basta con ser creativos para crear comidas apetitosas a la vista y al paladar.
Una dieta saludable no consiste en restringir cualquier alimento que contenga azúcar o grasa. De vez en cuando ingerir una barrita de cereal o un chip de verduras no hace daño, lo importante es moderar las porciones y la frecuencia del consumo.
Eso junto con practicar una actividad física frecuentemente y beber suficiente agua, le permitirá a nuestro cuerpo consumir las calorías esenciales para su funcionamiento y quemar aquellas grasas que no son necesarias.